Por su parte, el selectivo S&P sumó un 1,80% y el tecnológico Nasdaq un 1,4% gracias a la evolución de la actividad manufacturera en febrero, que subió más de lo esperado y unos resultados empresariales que resultaron mejor de lo esperado.
Los buenos resultados de la multinacional farmacéutica alemana Merck, que obtuvo en 2009 un beneficio neto de 9.450 millones de euros, lo que supone un 65% más que en 2008, y el repunte de las materias primas han conseguido que los números verdes hagan acto de presencia en la Bolsa neoyorquina. Al cierre sus acciones subieron un 2,10%.
Pero no fue la única noticia positiva de la jornada. El índice manufacturero de Estados Unidos subió en febrero a 24,91 puntos en comparación con los 15,92 del mes anterior, por encima de lo esperado por los analistas, que situaban el dato en 18 puntos.
El alza de las materias primas benefició al fabricante de aluminio Alcoa, que se revalorizó un 3,39% y a las petroleras con subidas del 2,8% para Chevron y del 2,4% para Exxon Mobil en una jornada en la que el precio del barril de Texas, de referencia en EE UU, sumó un 3,88% hasta cerrar en los 77,01 dólares por el aumento de las tensiones entre Irán y los países occidentales que pretenden detener su programa nuclear.
Los buenos resultados de Barclays sentaron muy bien en el ánimo inversor. El banco británico, una de las escasas entidades de Reino Unido que logró evitar la entrada del Gobierno en su accionariado durante la crisis financiera, logró un beneficio neto de 9.393 millones de libras (10.795 millones de euros) en 2009, lo que supone más del doble que en el año anterior. Unas noticias que han sentado bien a las entidades financieras en EE UU como Bank of America, que se anotó un 4,91%, seguido por JPMorgan Chase, cuyas acciones se revalorizaron un 2,72%.
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