La onza troy de oro cerró el jueves con registros negativos tras dos sesiones de establecer records históricos, beneficiado por la anterior aversión por el riesgo.
Así, en el Commodity Exchange (Comex), el contrato de la onza de oro para entrega en junio, que el miércoles escaló un tope intradía sin precedentes de mil 249.20 dólares, cerró en mil 230.10 dólares, con una caída de 13.90 dólares o 1.1 por ciento.
El metal dorado, que acumula un rendimiento de 12 por ciento en el año, se había beneficiado recientemente de compras de seguridad al persistir en los mercados las dudas sobre la capacidad de los países más pequeños de la zona euro para reducir sus déficit fiscales, pese a un paquete de asistencia de un billón de dólares.
No obstante, este jueves, con los mercados más tranquilos al respecto, los inversionistas optaron por liquidar contratos para tomar ganancias.
El cobre subió el jueves debido a cierto alivio por las nuevas medidas de austeridad que prometieron Portugal y España para resolver sus problemas de deuda, pero las preocupaciones acerca del potencial impacto de los planes sobre la expansión limitaban las alzas.
El cobre referencial para entrega en tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME, por sus siglas en inglés) terminó a 7.160 dólares la tonelada desde un cierre de 7.025 dólares el miércoles.
En Estados Unidos, el cobre para entrega en julio subió 4,35 centavos, o cerca de un 1,4 por ciento, para cerrar a 3,2315 dólares la libra en la división COMEX de la Bolsa Mercantil de Nueva York.
La plata se comercializaba a 19,40 dólares desde 19,48 dólares, el platino a 1.716,0 dólares desde 1.736,50 y el paladio a 536 dólares desde 540.
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