Las principales bolsas europeas frenaron hoy en la sesión de tarde la
tendencia bajista y redujeron al cierre las pérdidas, un comportamiento
parecido al que también tuvo Wall Street.
Al cierre de la jornada
en Europa, el FTSE-100 de Londres perdió un 0,2 %, el CAC 40 de París
bajó un 0,5 %, el FTSE MIB de Milán retrocedió un 1,2 %, el Ibex 35 de
Madrid se dejó un 1,7 % y el PSI-20 de Lisboa cayó un 3,2 %.
El DAX 30 de la bolsa de Frankfurt, incluso, cambió de tendencia y ganó un 0,1 %.
Los
impulsos vinieron de EE.UU., donde la producción industrial subió un 1 %
en septiembre y la cifra semanal de solicitudes de subsidio de
desempleo bajó al nivel más bajo en catorce años.
La bolsa de Atenas cayó un 2,2 % porque
los inversores están preocupados por la posibilidad de que Grecia
abandone el plan de rescate.
El Banco Central Europeo (BCE) decidió hoy reducir los
recortes que aplica a los bonos soberanos griegos y a los bonos
bancarios garantizados por el Gobierno heleno cuando sean utilizados
como garantía para obtener financiación.
De este modo, el BCE facilita la concesión de préstamos a los bancos griegos. Actualmente
los recortes que aplica el BCE a los bonos griegos se sitúan entre el
15 y el 72 %, dependiendo de qué tipo de bonos se trate y de los
vencimientos.
Los malos datos económicos de Europa y de EE.UU. de
comienzos de la semana han desencadenado pérdidas generalizadas en los
mercados de renta variable desde el miércoles.
La inflación
interanual en la zona del euro se situó en septiembre en el 0,3 % y en
Europa en el 0,4 %, en ambos casos el nivel más bajo desde hace cinco
años.
Estas cifras señalan el estancamiento de la demanda y hacen temer una triple recesión en Europa a muchos inversores extranjeros.
El escepticismo respecto a la zona del euro también se
refleja en la fuerte subida de las primas de riesgo de la deuda soberana
de los países periféricos.
El riesgo país de Grecia ha superado
los 814 puntos básicos después de que la rentabilidad de su deuda a diez
años cerrara la sesión en el 8,96 %.
La inestabilidad en los
mercados a causa de las dudas sobre la situación económica mundial
también se ha trasladado a Portugal, donde su deuda soberana ha
terminado con una rentabilidad del 3,48 % y su prima de riesgo en 266
puntos básicos.
La prima de riesgo italiana ha sobrepasado en
algunos momentos los 200 puntos básicos, el máximo desde febrero pasado,
aunque luego ha cerrado la sesión en 176 puntos, con la rentabilidad
del bono a diez años en el 2,58 %.
En España, la prima de riesgo
ha llegado a superar los 150 puntos básicos por primera vez desde
mediados de agosto. Al cierre, la rentabilidad del bono español se ha
situado en el 2,21 % y la prima en 140 puntos.
Asimismo cae el precio del
petróleo y el barril de crudo Brent, de referencia en Europa, se paga
algo por debajo de 83 dólares, el precio más bajo desde hace cuatro
años.
Hoy, el petróleo de Texas, que ha experimentado fuertes
pérdidas desde fines de septiembre, cerró con un avance superior al 1 % y
terminó con un precio de 82,71 dólares.
El temor a una recesión
en Europa y una ralentización económica en EE.UU., así como la
incertidumbre sobre la propagación del virus del ébola se añaden ahora a
las crisis en Ucrania y Oriente Medio.
Los grandes inversores se
cubren en estos momentos frente a mayores pérdidas como indican los
índices de volatilidad, que han subido a máximos desde 2011.
No hay comentarios:
Publicar un comentario