La mayoría de las Bolsas de Asia han cerrado en rojo, lastradas por las tensiones geopolíticas en Irak y Ucrania.
En concreto, el Shanghai Composite perdió un 0.87%, mientras que el
índice S&P/ASX 200 de Australia bajó un 0.21% y el Hang Seng de Hong
Kong terminó con un recorte de 0.45 por ciento.
Del otro lado, en Corea
del Sur, el Kospi se incrementó un 0.40 por ciento. El índice de valores tecnológicos Kosdaq ganó un 0,35% y quedó en 537,90 unidades.
De igual forma, el índice Nikkei de la Bolsa de Valores de Tokio,
principal selectivo del continente, cerró la jornada con ligeras subidas
de 0.29% recuperando parte del terreno perdido el día de ayer, aunque
la mayoría de los inversionistas nipones continúan prudentes ante los
conflictos en Medio Oriente y Ucrania.
El segundo indicador, el Topix, que agrupa a los valores de la primera
sección, ganó 3,52 puntos, un 0,28%, y se situó en 1.238,20 unidades.
La media móvil a 25 días del Nikkei subió por encima de su promedio
de 100 días, una señal técnica positiva que podría ser uno de los
factores desencadenantes de este pequeño rebote.
Pero el clima sigue siendo cauteloso, después de que Rusia ha dejado
de entregar gas a Ucrania y, mientras los inversionistas esperan el
resultado de la reunión de dos días de la Reserva Federal de Estados
Unidos.
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