Los mercados bursátiles de Asia retrocedieron hoy ante los problemas de la zona del euro y la expectativa de que China confirmará la ralentización de su economía, con la excepción de la bolsa de Bangkok, que cerró a casi el mismo nivel que ayer.
En Tokio, la bolsa retrocedió el 0,62 por ciento y cerró por debajo de la barrera psicológica de los 9.000 puntos por primera vez en tres meses, en una caída motivada por los malos resultados presentados por varios grandes fabricantes de electrónica nipones.
El índice Nikkei bajó 56,34 puntos, el 0,62 por ciento, y quedó en 8.953,31 unidades, mientras que el índice Topix, que agrupa a todos los valores de la primera sección, perdió 7,04 puntos, un 0,92 por ciento, hasta 758,38 enteros.
En Seúl, la bolsa cayó el 1,43 por ciento, debido a la persistencia de la crisis de deuda de la zona del euro y la ausencia de estímulos para los inversores.
El índice referencial Kospi perdió 27,80 puntos, hasta 1.917,13 unidades, en una sesión en la que se movieron 3.760 millones de dólares, mientras el tecnológico Kosdaq se contrajo 0,61 puntos, el 0,12 por ciento, hasta los 493,66 enteros.
En Shanghái, la bolsa bajó un 0,63 por ciento, a pesar del anuncio, esta mañana, de que la inflación china se redujo hasta un 3,4 por ciento en abril, por debajo del 3,6 registrado en marzo.
El índice general de Shanghái concluyó así su cotización diaria en 2.394,98 puntos, un 0,63 por ciento a la baja, o 15,25 puntos por debajo del cierre de ayer.
En Hong Kong, el índice referencial Hang Seng bajó el 1,3 por ciento, o 262,65 puntos, y al cierre se situó en 19.964,63 enteros.