Las bolsas del lejano oriente cerraron hoy en
mixto. Tokio por su parte continúa con pérdidas debido al
fortalecimiento del yen frente al dólar. Seúl por su parte, saca cuentas
alegres gracias a las ganancias de Samsung durante la jornada.
El índice general de la Bolsa de
Shanghái cerró hoy con ganancias de un 1% hasta situarse en 2.630,49
puntos. El volumen de negocios fue de 338.960 millones de yuanes
(US$55.210 millones).
También la Bolsa de Seúl
cerró con un leve ascenso por las fuertes ganancias de Samsung
Electronics, la empresa con más peso en el mercado local, que anunció en
la víspera un proceso de recompra de acciones para estabilizar su
precio.
El índice referencial Kospi subió 1,25 puntos, el 0,06% hasta
1.982,09 unidades en una sesión en la que se movieron US$5.000 millones,
mientras el tecnológico Kosdaq, por el contrario, bajó 1,37 puntos, el
0,25% hasta los 545,97 enteros.
El gigante tecnológico Samsung
Electronics, valor de referencia de la bolsa de valores surcoreana,
anunció el martes una recompra de sus acciones por valor de 2,2 billones
de wones (1.590 millones de euros, US$1.990 millones) para estabilizar
el precio de sus títulos en la Bolsa de Seúl.
Sin
embargo, menos positiva concluyó la jornada para el mercado bursátil de
Hong Kong que cerró su sesión de hoy con un retroceso del 0,45% (107,7
puntos) en su índice referencial, el Hang Seng, que se situó en los
24.004,28 puntos.
De igual forma, la Bolsa de
Tokio volvió a cerrar en rojo y se dejó un 0,78% debido a una leve
recuperación del del yen frente al dólar, lo que perjudica a las
compañías exportadoras.
El selectivo Nikkei cerró con una bajada de
135,08 puntos y se situó en 17.248,50 unidades, mientras que el segundo
indicador, el Topix,retrocedió 14,50 puntos, un 1,05% hasta 1.391,90
enteros. El sector de la minería lideró un día más las pérdidas, seguido
por el inmobiliario y el eléctrico.
El parqué tokiota abrió a la baja,
una tendencia que se fue acentuando a medida que el dólar se devaluaba
frente a la moneda local y se cambiaba en la banda baja de los 117
yenes. Los analistas locales señalaron que se estaba dando además una
que se estaba extendiendo la sensación entre los inversores de que el
Nikkei está sufriendo un sobrecalentamiento, lo que ayudó a empujar al
selectivo a los números rojos.
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