En rojo cerró el mercado bursátil de
Hong Kong su sesión de hoy con un retroceso de un 1,08% o de 260,39
puntos, en el índice referencial Hang Seng, que se situó en 23.826,99
enteros.
De igual forma, la Bolsa de Seúl cerró
con un leve descenso, atribuido por analistas locales a las posiciones
conservadoras de los inversores por el temor a los efectos negativos
sobre el Kospi de la nueva conexión bursátil entre Shanghái y Hong Kong
en China.
El índice referencial Kospi bajó 1,51 puntos, el 0,08 hasta
1.943,63 unidades, en una sesión en la que se movieron US$3.380
millones, mientras el tecnológico Kosdaq descendió 10,75 puntos, el
1,98% hasta 531,18 enteros.
Desplome en la la Bolsa de Tokio que
cayó hoy casi un 3% en una jornada fatídica en la que Japón entró en
recesión técnica tras una sorprendente contracción del PIB en el
trimestre julio-septiembre. El índice Nikkei bajó 517,03 puntos, un
2,96% y se situó en las 16.973,80 unidades, mientras que el segundo
indicador, el Topix, perdió 34,28 puntos, un 2,44% hasta los 1.366,13
enteros.
Desde la apertura, el parqué cotizó a la baja, pero la caída se
agudizó a lo largo de la mañana tras la publicación de unos
decepcionantes datos macro económicos cosechados por la tercera economía
del mundo entre julio y septiembre.
La misma tendencia siguió la Bolsa de
Shanghái que cerró con una caída de un 0,19%, en el día en que entró en
funcionamiento su nuevo mecanismo de vinculación con la Bolsa de Hong
Kong, debido en parte al mayor aumento trimestral de los préstamos
fallidos en China desde 2005, que se ha registrado en el tercer
trimestre.
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