Wall Street borró este martes las fuertes ganancias acumuladas durante
una jornada de gran volatilidad por los precios del crudo y el Dow
Jones, su principal indicador, cerró con un descenso del 0,15 %.
Ese indicador, que llegó a subir más de 200 puntos en la primera mitad
de la sesión, terminó con un descenso de 27,16 unidades hasta los
17.613,68 enteros, mientras que el selectivo S&P 500 se dejó un 0,26
% (-5,23 puntos) hasta las 2.023,03 unidades.
Por su parte, el índice compuesto del mercado Nasdaq, en el que cotizan
algunas de las mayores empresas tecnológicas del mundo, terminó con un
descenso del 0,07 % (-3,21 puntos) y se ubicó en los 4.661,50 enteros.
Desde los primeros compases de la jornada los operadores en el parqué
neoyorquino se decantaron por las compras animados por el buen sabor de
boca que dejaron los resultados trimestrales del gigante siderúrgico
Alcoa.
El fabricante de aluminio cerró el año pasado con un beneficio neto de
268 millones de dólares, frente a los casi 2.300 millones de pérdidas
que registró en 2013, mientras que su facturación ascendió a 23.900
millones de dólares.
Los inversores celebraron también que el superávit comercial de China
se disparó en 2014 y alcanzó los 385.000 millones de dólares como
resultado de la debilidad de las importaciones, mientras que el total
del comercio exterior subió un 3,4 %. Sin embargo, pasada la mitad de la
sesión se encendieron otra vez las alarmas entre los operadores
bursátiles por el desplome del precio del petróleo y, en la recta final
del día, borraron todas las ganancias y los tres indicadores entraron en
territorio negativo.
El crudo de Texas, de referencia en Estados Unidos, bajó un 0,39 % y
cerró en 45,89 dólares el barril, hasta niveles que no se veían desde
abril de 2009, mientras el de Brent, de referencia en Europa, cayó un
1,77 % y terminó en 46,59 dólares.
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