Los principales indicadores de Wall Street cerraron la jornada con
números mixtos pese al positivo dato del ISM del sector servicios, el
cual creció de manera inesperada en octubre.
El índice no manufacturero escaló hasta los 55,4 puntos, desde los
54,4 puntos de septiembre y frente a una previsión del consenso de los
analistas que esperaba un retroceso hasta los 54 puntos.
En este contexto, el Dow Jones bajó 0,13%, hasta las 15.618 unidades.
La misma tendencia experimentó el S&P 500 que descendió un 0,28%,
alcanzando los 1.762,9 enteros.
Por su parte, el Nasdaq creció un 0,08%, llegando a los 3.939,8
puntos. Con esto, el indicador tecnológico acumuló una ganancia de 30,4%
en lo que va del año.
Ayer la Reserva Federal no quiso ceder todo el protagonismo al BCE, y
el presidente de la Fed de St. Louis, James Bullard, tranquilizó a los
mercados al prometer paciencia antes de cortar el programa de compra de
deuda.
En el caso del Banco Central Europeo el debate no se centra en un
repliegue. Todo lo contrario. Los analistas barajan una eventual rebaja
de las tasas de interés, aunque difieren en los plazos. Algunas firmas
prevén un recorte este mismo jueves, mientras que una mayoría aplaza la
decisión al menos a diciembre.
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